[icon color=»Accent-Color» size=»regular» image=»steadysets-icon-chat»] Contexto

Spot de la Campaña de José Serra a la Presidencia de Brasil, durante la contienda electoral de 2010, a nombre del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB). La campaña de Serra debió enfrentar la alta popularidad del gobierno de Lula que arropo desde el comienzo la aspiración de Dilma Rousseff. Era tal la fuerza de la aspiración de Dilma que en algún momento hizo creer que no habría segunda vuelta electoral, lo que llevo a Serra a tratar de victimizarse denunciando juego sucio y de abuso de poder por parte del gobierno de Lula. En forma inteligente Serra no dirigió sus ataques contra el popular Lula sino que exalto algunas de sus obras y se mostró en la primera etapa como el continuador más preparado de las acciones de gobierno de Lula. Serra se mostró de acuerdo en que había que perseverar en las políticas de rescate de la pobreza, inserción social y desarrollos educativo y sanitario. En particular, se comprometió a mantener el exitoso programa Bolsa Familia, lanzado por Lula para alcanzar los objetivos de su estrategia Hambre Cero.  En la recta final de la campaña la campaña de Rousseff fue afectada por algunos escándalos de corrupción y por la actitud imperial que mostraba Lula hacia los opositores y los periodistas, lo que la hizo bajar en la intención de voto y llevo la campaña a una segunda vuelta electoral. El 3 de octubre, Serra, con un inesperado 32,6% de los votos, un nivel de apoyo que las encuestas le habían negado desde agosto, mereció la segunda oportunidad del 31 de octubre para medirse con una Rousseff que sólo obtuvo el 46,9%. Serra interpreto los resultados como un triunfo pues los analistas hacían presagiar una derrota en primera vuelta. La segunda vuelta estuvo marcada por los ataques de una y otra campaña. La campaña de Serra se enfocó en la corrupción y en algunos personajes cuestionados que rodeaban a Rousseff, y la de Rousseff a generar la percepción de que Serra era un defensor de los ricos y sus privilegios. Al final se impuso Dilma con el 56% de los votos contra el 44% de Serra.