En las elecciones presidenciales de 1988 el afiche “Generation Mitterrand” hizo parte de una campaña de expectativa que antecedió el anuncio de Mitterrand de lanzarse de nuevo a la presidencia de Francia. A diferencia de sus antecesores, Mitterrand manejó el anunció en forma ambigua con mensajes que hacían suponer su deseo de un retiro apacible en compañía de sus libros, sus amigos y su familia. Entretanto los candidatos tratan de asumir un escenario político con la sombra permanente de Mitterrand. El ultraderechista Jean-Marie Le Pen y el comunista André Lajoine trabajan las extremas de cada uno de sus espectros políticos mientras Jacques Chirac, el primer ministro y dirigente neogaullista, se encuentra preocupado por el 18% de intención de voto que le dan las encuestas, siempre por debajo de Raymond Barre de la Unión para la Democracia Francesa el partido de centro con raíces en la Democracia Cristiana fundado por Valéry Giscard d´Estaing. El nombre del candidato socialista se conocerá un mes antes de la elección. Los estrategas socialistas consideran que mientras no haya candidato todo favorecerá el enfrentamiento y las heridas reciprocas entre los candidatos en campaña mientras los socialistas observan desde la palestra con un candidato en ciernes fresco y preparado para realizar una campaña corta, contundente y efectiva. Los publicistas socialistas liderados por Jacques Séguéla han lanzado una campaña de expectativa en donde se desactivan debilidades y se resaltan fortalezas. “Generation Mitterrand” en donde las letras dejan ver a un bebe con expresión esperanzadora que coge la mano de un hombre mayor. ¿La mano de Mitterrand? El afiche es fabuloso: se focaliza el énfasis de mensaje visual en el porvenir de esos millones de niños sedientos de futuro y no en el hombre que lo guía, que ya hizo su vida y que tiene 72 años. Desactivando así las voces que hablan de la edad de Mitterrand como un impedimento. Se maneja subliminalmente la esperanza, la experiencia y coyunturas como el aniversario del movimiento estudiantil de Mayo del 68, dando a entender que esa generacion, por sus ideales, está con Mitterrand.