[icon color=»Accent-Color» size=»regular» image=»steadysets-icon-chat»] ContextoSpot de la Campaña Presidencial de Cristina Kirchner, durante la contienda electoral del 2011, a nombre del Frente para la Victoria. La sociedad argentina aborda estas elecciones con el recuerdo de la inesperada muerte de Néstor Kirchner en 2010. Esa emotividad es tomada por los estrategas de campaña para movilizar las emociones de los electores a favor de la aspiración de Cristina. El slogan principal fue “La Fuerza de Cristina”, un concepto que había nacido espontáneamente por parte de la población, durante los días de las honras fúnebres de Néstor. A partir de ese slogan emocional se fueron desarrollando conceptos como “La fuerza del amor”, “La fuerza de la alegría” y “La fuerza de la Esperanza”, entre otras. En torno a eso se fue mezclando la imagen misma de Nestor Kirchner, el fallecido esposo de la candidata, iniciando con slogans como “La fuerza de él”, “La fuerza de la juventud”, “La fuerza de las mujeres” y “La fuerza de los ancianos”, entre otros. El primer spot televisivo de la campaña de reelección de Cristina Kirchner lo lanza cuatro días después que sus candidatos opositores y va dirigido para captar el voto de la juventud. Es un mensaje en donde se escucha la voz de la candidata aludiendo a la energía de los jóvenes: “Me gusta ver las banderas flameando, me gusta verlos cantando el himno. ¿Cuándo nuestra juventud cantaba el himno con la pasión que hoy lo canta, con el amor que hacen flamear las banderas? Yo creo que eso también es hacer patria y democracia. Ningún pueblo, ninguna sociedad puede progresar, si no se sienten orgullosos de pertenecer al país en el que ha nacido”. Las imágenes que muestra el spot son de jóvenes militantes y jóvenes de La Campora durante el velatorio del expresidente Néstor Kirchner. A diferencia de sus opositores, Cristina evita hablar frente a la cámara; es solo su voz la que se escucha; siempre aparece vestida de traje negro (en señal de luto). Al final del cierre del spot, se le distingue a ella por espaldas vestida de blanco, algo que no hacía desde el 27 de octubre del 2010, denotando victoria. En las piezas no se le da visibilidad a su compañero de fórmula, Amado Boudou. La estrategia de Cristina es crear un entorno de emocionalidad tan grande en torno al recuerdo de Néstor, que los electores terminen dando el pésame a su familia a través del sufragio que depositan en las urnas. Al final Cristina ganó en primera vuelta con el 54.11% de los sufragios, muy distante del segundo, Hermes Binner, que obtuvo un 16.81% de los votos.