La mitad lo quiere. Todos lo respetan.

Campaña a las elecciones parlamentarias de 2001 por la provincia de Buenos Aires. Este es el primer afiche de la campaña de Alfonsín. Aparece el rostro del expresidente en primer plano, media cara y la frase “La mitad lo quiere. Todos lo respetan”. La campaña se da durante el ejercicio de la Presidencia de Fernando de la Rua, el cual se encuentra desprestigiado por no haber logrado la reactivación económica que había prometido. El gobierno había nombrado a Domingo Cavallo como ministro de Economía con poderes excepcionales. La expresión de Alfonsín en la imagen de campaña evidencia serenidad y experiencia para un momento de crisis. Alfonsín, que apoyo a la candidatura de De la Rua, marca distancias con el gobierno. La campaña es modesta en sus recursos pero apela al prestigio de Alfonsín, quien es percibido por la opinión como un hombre honorable y veraz. Es criticado por otros aspectos pero todos le reconocen eso. Los estrategas saben que en la historia del presidente hay temas que dividen a la opinión pública pero también que hay consensos en torno a él. Es inteligente, estratégicamente, mostrar, en la comunicación, que son conscientes de la división que genera pero evidenciar claramente los consensos. Es un buen afiche visual y estratégicamente.